me venden al yugo.
Soy territorio del demonio, un lejano y sombrío recuerdo de mis antepasados.
La somnolencia de mis raíces me perturba, me engaña cruelmente.
La traición ya fue consumada, soy un capullo vacío.
Si fuera pájaro volaría lejos en clandestinidad, le pediría al viento su amparo,
un soplo vital, que alivie penurias y despierte consciencias.
Valeria León.